El arte de hacer cometas está casi perdido en mi. De pequeño pasaba tiempo construyendo cometas que volabamos los fines de semana con mi viejo. O en el parque con los amigos. Haciamos papagayos, barriletes, aviones, cajones... todo tipo de cometas y para diferentes fines. Tenias las cometas que volabas para hacerlas llegar lo más alto posible y las que usabas para pelear con tus amigos. Habian comentas que fabricabas simplemente por que querías sentir el viento jalando con tanta fuerza que tus manos no resistían... Y otras que hacias sólo por que si. El hecho de construir una cometa ya era motivo suficiente y no importaba si volaba o no.
En estos dias tecnologicos mi vision de una cometa era algo con ingeniería CAD, materiales aeroespaciales y muchos dólares de inversion. La idea de tener un ala super-eficiente, atada de una o varias cuerdas y capaz de hacer acrobacias increibles habia ganado al principio básico y elemental, la diversion.
Asi que este domingo me di una vuelta por mis inicios y bajo la inspiración de mi hija construí una cometa enorme! bastante simple pero grande y colorida. Entre mi hermano y yo nos tomamos un par de horas en hacerla y luego de decorarla no habia tiempo para probarla... pero el hecho de consrtuirla me recordó lo escencial. El trabajo manual simple es gratificante y me ayuda a despejarme.
Súmale a esto la cara de tus hijos al ver una cometa construida para ellos y ya no hay super-cometa que le gane. Vamos! construyan sus cometas, no esperen a Agosto! disfruten de la goma en las manos y esas cosas...
Finalmente la obra terminada!
En estos dias tecnologicos mi vision de una cometa era algo con ingeniería CAD, materiales aeroespaciales y muchos dólares de inversion. La idea de tener un ala super-eficiente, atada de una o varias cuerdas y capaz de hacer acrobacias increibles habia ganado al principio básico y elemental, la diversion.
Asi que este domingo me di una vuelta por mis inicios y bajo la inspiración de mi hija construí una cometa enorme! bastante simple pero grande y colorida. Entre mi hermano y yo nos tomamos un par de horas en hacerla y luego de decorarla no habia tiempo para probarla... pero el hecho de consrtuirla me recordó lo escencial. El trabajo manual simple es gratificante y me ayuda a despejarme.
Súmale a esto la cara de tus hijos al ver una cometa construida para ellos y ya no hay super-cometa que le gane. Vamos! construyan sus cometas, no esperen a Agosto! disfruten de la goma en las manos y esas cosas...
Finalmente la obra terminada!